Pechuga de pavo como nombre en clave y datáfonos para pagar en nueve puntos de venta de droga desmantelados en 24 horas en Madrid

Que no tienes efectivo, no pasa nada, se puede cobrar el gramo con datáfono. El narcopiso desmantelado en Leganés (Madrid) este 27 de mayo había sofisticado sus canales de venta hasta tal punto que se podía pagar con tarjeta y por Bizum. Los camellos también contaban con una máquina para detectar billetes falsos y otra para contarlos. Hasta este punto de venta de droga se desplazaban clientes de toda la región. Este ha sido uno de los nueve narcopisos desarticulados por la Policía Nacional entre ese día y el siguiente, en apenas 24 horas, en toda la Comunidad de Madrid, un golpe al narcotráfico que más afecta a los vecinos, el que se produce en la puerta de enfrente del rellano.

La organización criminal que controlaba el narcopiso del datáfono, contaba con otros dos en el mismo municipio y otro en Getafe. Cuando sus se vieron acorralados por la policía tiraron gran parte de la sustancia estupefaciente y el dinero por la ventana. “Escondían la droga dentro de cajas de zapatos, móviles, bajo los colchones y en el interior de armarios. Además, clasificaban parte de las sustancias estupefacientes en bolsas con etiquetas con inscripciones como pechuga de pavo, letras o puntos de colores”, detalla el cuerpo en un comunicado.

Poco después, la policía entró en una vivienda en Parla en la que habían constatado que se vendía droga pero, eso sí, con cita previa. Nadie podía presentarse en el lugar sin ser esperado y la transacción se completaba en los alrededores de la vivienda. El vendedor trabajaba “desde el amanecer, hasta el anochecer” y era un experto en medidas de seguridad para evitar ser descubierto. Tenía una oferta variada: cocaína, hachís y marihuana. Además, fueron intervenidos útiles para la preparación de las dosis, básculas de precisión, un teléfono móvil que había sido previamente sustraído con violencia y más de 1.800 euros en efectivo.

En Puente de Vallecas se detuvo a una pareja que vendía droga en presencia de sus hijos menores de edad y que además lo hacía cerca de tres colegios y un parque infantil. En la casa, los agentes hallaron cocaína, pero también varias navajas de gran tamaño. No muy lejos de allí, en Villa de Vallecas, una patrulla observó un coche que circulaba a una velocidad muy reducida. Su actitud les resultó sospechosa y les dieron el alto. Los perros de la Unidad de Guías Caninos detectaron algo en la guantera y, tenían razón, allí había dos kilos de cocaína.

Por último, fueron desmantelados dos narcopisos en el distrito de a. Los dos vendían heroína, además de otros estupefacientes. En uno de los pisos operaban tres personas que fueron detenidas y que contaban con armas blancas y un puño americano.