Más de 43.000 firmas vecinales reclaman un corredor verde, sin vial de coches que lo atraviese, en los barrios del sur de Valencia
Compromís y PSPV rechazan una nueva “avenida encubierta” y el concejal de Urbanismo anuncia un proceso de participación pública


Una decena de entidades vecinales, encabezadas por la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia, han registrado este martes 43.000 firmas en defensa de un corredor verde en los barrios del sur de la capital, ahora que la paisajista Kathryn Gustafson ha recibido el encargo del Ayuntamiento de actualizar el bulevar García Lorca, con 4.000 nuevas viviendas previstas, que surgirá tras el soterramiento de las vías del tren dentro del proyecto de Parque Central.
El anterior gobierno local, de Compromís y PSPV, acordó en noviembre de 2021 que el futuro bulevar García proyectado sobre la playa de vías del Parque Central de Valencia, se transformaría finalmente en un corredor verde de 49.000 metros cuadrados de superficie y un kilómetro de longitud.
El objetivo era naturalizar este espacio y eliminar los carriles previstos inicialmente para el tráfico rodado —solo habrá s de entrada y salida a los bloques de edificios en bucle—; con aceras de seis a 12 metros de ancho y dos carriles bici bidireccionales en los laterales.
El Ayuntamiento tenía previsto ejecutar este corredor verde mientras se llevan a cabo las obras del canal de ferroviario a la ciudad y costarán 400 millones de euros. La idea era que el nuevo corredor conectara los barrios del sur y se prolongara hasta el nuevo y renaturalizado cauce del Túria.
Una representación de nueve asociaciones vecinales —Abastos-Finca Roja, Petxina, La Roqueta, Patraix, San Marcelino, Malilla, Tres Forques, Cuidem la Raïosa o la comunidad de propietarios Edificio Iturbi— han presentado minutos antes de iniciarse el pleno municipal del mes de mayo unas 43.000 firmas para solicitar que se mantenga el proyecto de Compromís y el PSPV y que PP y Vox ha replantado.
Sergi Campillo, concejal de Compromís en Valencia, ha insistido en que el Ayuntamiento tiene una oportunidad como la que se dio hace años con la conversión del antiguo cauce del Turia. “Necesitamos esa visión climática en el diseño de los espacios ciudadanos”, ha subrayado Campillo.
“Estamos en contra de un vial continio como el de Blasco Ibáñez y no dé a entender que antes no se garantizaba el a las viviendas o el a los servicios de emergencia”, ha añadido.
“Ni los vecinos ni nosotros”, ha dicho la concejala socialista María Pérez cuando se ha debatido en el pleno la moción presentada por su grupo en defensa del corredor verde, “le pedimos lo imposible sino coherencia”. Y ha aclarado que la accesibilidad a las viviendas está fuera de toda duda. “Gustafson dejó claro que si por ella fuera, no habría viales para el tráfico rodado de lado a lado.
“No hay más pérdida de tiempo que empecinarse en un proyecto que no quiere nadie. Lo que pedimos es simple y sensato”, ha añadido Pérez.
El concejal de Urbanismo de Valencia, Juan Giner, ha asegurado que hace unos días hubo una reunión sobre este proyecto entre el equipo de Gufstanson, el director general de Urbanismo y técnicos del Ayuntamiento “para continuar impulsando el proyecto, asegurándose que realice un proceso de participación pública”. Al final, la moción del PSPV no ha salido adelante y se ha aprobado la propuesta del PP.
Mantenimiento del tráfico rodado
Las asociaciones vecinales de Valencia unidas en la Plataforma Corredor Verd manifestaron hace unas semanas su profunda preocupación y desconfianza ante el anuncio de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, sobre la firma del contrato con el equipo de la arquitecta Kathryn Gustafson para redactar el proyecto del tramo conocido como “Bulevard García Lorca”.
Los colectivos mostraron su desconfianza de que las intenciones del Ayuntamiento detrás de las promesas de la alcaldesa, que habla de un 70% de zona verde y un 30% de vialidad para “s de servicios y emergencias”. “La realidad es que este 30% supone el mantenimiento de vías de tráfico continuo que fragmentan el espacio y contradicen el objetivo de un gran parque urbano. Se trata, por tanto, de una nueva avenida encubierta, no de un parque”, denuncian.
“El soterramiento de las vías del tren representaba una oportunidad única para crear un gran pulmón verde en nuestra ciudad, un espacio para el disfrute de todos los valencianos”, declaran desde la Plataforma Corredor Verde. “Sin embargo, vemos con preocupación cómo el Ayuntamiento plantea un diseño que prioriza la circulación de vehículos en lugar de crear un verdadero corredor verde”.
La Plataforma Corredor Verd defiende que el diseño del bulevar se integre plenamente en el proyecto ganador del masterplan “Green Leaf”, del equipo Omgeving, y reconocido por el jurado como el más innovador y coherente con los criterios ambientales y de transformación urbana que requiere el siglo XXI. El proyecto, continuan, concibe este espacio como un gran parque metropolitano, sin circulación de vehículos. Este proyecto, fruto de un proceso participativo, representa la visión de la ciudadanía para este espacio. Las asociaciones vecinales recuerdan que existe un compromiso escrito por parte del Ayuntamiento de buscar el consenso vecinal en el diseño del bulevar, y exigen que cualquier proyecto que se apruebe cuente con su aval.
“No permitiremos que se introduzca tráfico rodado dentro del parque, desvirtuando el espíritu de este proyecto. Exigimos un bulevar 100% verde, sin coches, donde los peatones y las zonas verdes sean los protagonistas. Es innegociable”, han declarado portavoces de la Plataforma Corredor Verde.
Las asociaciones vecinales también han insistido en que el diseño de las nuevas viviendas debe garantizar el a las mismas de forma perimetral, utilizando las vías ya existentes, como la calle San Vicente o la avenida de Malilla, tal como se accede a las viviendas ya existentes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad , así podrás añadir otro . Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
