Las mejores almohadas cervicales para descansar
Analizamos cinco almohadas viscoelásticas para las cervicales que prometen una agradable sensación de confort al utilizarlas. ¿Lo consiguen?


Descansar y empezar el día con la mejor de las energías no siempre es posible, y es que si la elección de un buen colchón viscoelástico es importante no lo es menos una almohada que garantice el descanso de cabeza, cervicales, cuello y hombro.
En este sentido, la oferta disponible se caracteriza por su versatilidad, aunque para esta comparativa nos vamos a centrar en los modelos cervicales viscoelásticos que también se conocen como almohadas con memoria o memory foam. Como su propio nombre señala, el material de que están compuestas es la viscoelástica, un tipo de espuma suave a la par que firme que desarrolló la NASA para aliviar la presión que generaba el tejido de los asientos donde se colocaban los astronautas en el momento del despegue.
Dentro de esta categoría existen modelos muy interesantes de almohadas cervicales de viaje, pero en esta ocasión nos centraremos en las almohadas específicas para tener en casa.
¿Cuáles son las mejores almohadas cervicales?
Para responder a esta pregunta, hemos seleccionado los siguientes modelos: Bravedge (9), Don Descanso almohada de copos Lavanda (7,5), Litspot (8), Misiki (8,5) y Tempur Symphony (9). Estos han sido los aspectos tenidos en cuenta en sus respectivas valoraciones:
- Diseño: enfocado a la estructura de la almohada cervical viscoelástica, pero también a la calidad de costuras y tejidos utilizados.
- Viscoelástica: aunque la base de todas ellas es la viscoelástica, no se aprecia la misma calidad en cada uno de los modelos.
- Grado de firmeza: también es importante porque contribuye a la sensación de confort que puede llegar a ofrecer cada una de las almohadas
- Descanso: ¿la almohada cumple con lo que promete?, ¿aporta sensación de confort?, ¿se adapta bien a la cabeza?
¿Cuál es la almohada cervical más cómoda para dormir?
A lo largo de varios días hemos probado cada una de estas cinco almohadas cervicales viscoelásticas. Esto nos ha permitido examinar la calidad de sus acabados (por ejemplo, costuras) y comprobar cómo es la experiencia de uso con cada una de ellas: su comodidad, firmeza, capacidad de adaptación y descanso. Dos de ellas, los modelos Bravedge y Tempur Symphony se han alzado como las ganadoras de la comparativa al conseguir la misma valoración media. Además, la almohada memory foam de Bravedge ha conseguido la mejor relación calidad-precio.
Ambas propuestas consiguen desmarcarse ligeramente del resto, no solo desde el punto de vista del diseño sino también de los resultados. Son las más cómodas y gracias a ellas conseguimos un descanso más placentero.
Almohada cervical viscoelástica, Tempur Symphony


Con unas dimensiones de 630 x 430 x 125 milímetros, esta almohada memory foam tiene un diseño de líneas rectangulares que resulta sencillo. Al cogerla se siente ligera y resulta supersuave al tacto: se nota que el fabricante ha cuidado hasta el más pequeño de los detalles, lo que acrecienta su durabilidad. Como era de esperar, la funda exterior (está fabricada en poliéster) se puede meter en la lavadora.
Tras esta primera toma de o, percibimos que sus dos caras no son completamente iguales. Esto se debe a que en función de cómo durmamos el fabricante recomienda utilizar una u otra. La cara plana está recomendada si dormimos de lado o boca arriba, mientras que la arqueada es preferible si dormimos boca abajo. Lo cierto es que funciona. Esta almohada cervical tiene, por otro lado, un grado de firmeza medio que resulta agradable mientras que la calidad de su viscoelástica es una de las mejores de toda la comparativa. Lo notas enseguida, cuando posas la mano sobre ella y se hunde lentamente para luego volver a su posición inicial. Tanto la cabeza como las cervicales se sienten cómodas a la vez que protegidas, lo que promueve un buen descanso.